sábado, 2 de junio de 2007

Sin lengua en los pelos o las 300 ranas impúdicas del rey Abrelatas.

Una mosca de oro el hocico le dice a otra: Oye ...mosca.
La otra mosca, alta cultura, dios ingrato y trono mental,
en displecente acento:
ah, eras tu.
Has memoria.
Varias, muchas he hecho.
Eso lo sé, pero se derrumban.
No recuerdo, no puedo recordar eso.

***
Este Dios lleno de várices y felpa peluquina,
de verga chistorra y refrita
crepitando algunos cigarrillos de tercera,
es nombrado,
invocado por los Suelos y la Bandera.
Ambos –Suelo y Bandera- se asisten derechos sobre la nada,
sobre un montón de várices y humo.
Cantaba Joaco que el destino es un maricón y Vallejo: "perdonen la tristeza"

No hay comentarios: